Por Ricardo Klein

Soda Stereo vuelve a estar en boca de todos. Tras varios días de misterio en sus redes sociales, finalmente se confirmó el espectáculo “Soda Stereo Ecos”, un proyecto que promete reunir en escena a Charly Alberti, Zeta Bosio y Gustavo Cerati en un formato nunca antes visto.


La propuesta ha generado un torbellino de comentarios. Mientras Charly y Zeta estarán presentes tocando en vivo, la voz y guitarra de Gustavo llegarán mediante un sistema tecnológico que combina grabaciones originales con proyecciones y efectos digitales. No se trata de un tributo ni de un reemplazo vocal, sino de un intento por recrear al propio Cerati en escena, siguiendo el modelo de espectáculos
internacionales como ABBA Voyage.

La polémica: homenaje o explotación
El anuncio ha dividido a los seguidores. Para algunos, se trata de un homenaje único e irrepetible que permite revivir la magia de Soda Stereo con su formación clásica. Otros, en cambio, critican la idea de “resucitar” a Cerati con recursos digitales, señalando que puede rozar lo morboso y comercializar con su memoria. En redes sociales, las discusiones son intensas: mientras unos celebran la posibilidad de ver a su banda favorita “junta otra vez”, otros se preguntan si la experiencia puede considerarse auténtica.

Ventas que despejan dudas

Más allá de las controversias, el público ha hablado con su billetera. Las funciones del 21 y 22 de marzo, 6 de abril y 4 de junio de 2026 en el Movistar Arena de Buenos Aires se agotaron en tiempo récord, lo que llevó a sumar una quinta fecha (hasta ahora) para el 10 de junio de 2026, la cual tambien ha sido SOLD OUT publicado en las mismas redes oficiales de la banda.

El fenómeno demuestra que Soda Stereo mantiene un vínculo indestructible con sus fans, incluso frente a propuestas tan arriesgadas como esta. En palabras oficiales de la producción: “Gustavo, Charly y Zeta, juntos una vez más. Una experiencia única donde lo
imposible se hace real.”

Con “Ecos”, Soda Stereo no solo revive su legado, sino que también abre un debate sobre los límites entre la tecnología, el homenaje y la memoria cultural. Lo cierto es que, polémico o no, el regreso de Soda ya es un éxito rotundo.

El pasado jueves 25 de septiembre de 2025 se confirmó el fallecimiento de Fernando Díaz Corona, conocido en la escena musical como “La Vitola”, bajista original y compositor de la legendaria banda mexicana Los Amantes de Lola.

La noticia fue dada a conocer por la propia agrupación a través de sus redes sociales, donde compartieron un mensaje de despedida en honor al músico que formó parte de los primeros años del grupo y contribuyó a definir el sonido de su etapa más recordada.

Aunque hasta ahora no se han revelado las causas de su muerte, la noticia ha conmovido profundamente a los seguidores del rock en español, quienes han expresado su tristeza y gratitud por el legado de Díaz. Sus aportaciones musicales quedaron plasmadas en discos fundamentales como Los Amantes de Lola (1990) y La Era del Terror (1991), álbumes que consolidaron a la banda como referente del movimiento de rock mexicano de finales de los ochenta y principios de los noventa.Fernando “La Vitola” no sólo fue el bajista original del grupo: también participó en la composición de varios temas, dejando una huella imborrable en el repertorio de la banda y en la memoria colectiva de sus seguidores.

Los fanáticos han inundado las redes con mensajes de cariño y recuerdos de conciertos y canciones que marcaron una época, destacando la importancia de su figura en la consolidación del rock nacional.Hasta el momento, ni la familia ni la agrupación han dado más detalles sobre su fallecimiento. Sin embargo, su legado musical perdura y su nombre se suma a la lista de artistas que ayudaron a dar forma a la historia del rock en México.

Por Ricardo Klein / Fotos Archivo: Kristian López

El 25 de septiembre de 2007 no fue una noche cualquiera en Monterrey: fue la noche en que la leyenda se hizo presente. Tras más de once años de ausencia, Héroes del Silencio se reencontraron con sus fieles seguidores mexicanos en el Auditorio del Parque Fundidora, como parte de su aclamado Tour 2007.


La expectativa era enorme y, a pesar del tiempo transcurrido, la conexión con el público se sintió desde el primer acorde. La velada fue un viaje emocional a través de la discografía de la banda, que no dejó a nadie indiferente.


Un setlist de antología

Con un repertorio de 25 canciones, el grupo español demostró que su magia seguía intacta. Temas como «El estanque», «Entre dos tierras», «Maldito duende» y «La chispa adecuada» hicieron vibrar a las 15 mil almas reunidas en el recinto. Los músicos complacieron a sus seguidores con sus piezas más emblemáticas, desbordando una energía que mantuvo al público al borde del éxtasis.


Emoción a flor de pie


Después de dos horas y media de concierto, cuando las luces se apagaron y los asistentes pedían una más, la banda regresó para un emotivo cierre con «Tesoro» y «En brazos de la fiebre», dejando una marca imborrable en la memoria de quienes estuvieron ahí.


El legado intacto


Este concierto fue la prueba de que el legado de Héroes del Silencio sigue vivo. No solo ofrecieron un espectáculo memorable, sino que reafirmaron su estatus como una de las agrupaciones más importantes del rock en español. La energía, la entrega y la comunión con su público hicieron de esa noche una experiencia única e irrepetible.

El reencuentro de Héroes del Silencio en Monterrey no fue solo un concierto: fue la celebración de una leyenda que, a pesar del tiempo, permanece viva en el corazón de sus seguidores.